Nunca he entendido por qué la gente come pescado en Semana Santa, recuerdo de niña como no se podía ni entrar a la feria el viernes santo, porque el carro del pescado estaba en la entrada y era tanta la gente que bloqueaban el paso. Me da pena que no se le extienda el círculo de compasión a los peces cuando decimos que ‘no comeremos carne’, solo porque son tan diferentes a nosotros en sus expresiones faciales y somos sordos a sus gritos que no nos damos cuenta cuánto sufren, ya sean de apicultura o pescados en el mar, todos los peces tuvieron un final terrible (Les recomiendo leer al respecto en Comer Animales de Jonathan Safran Foer, googlear acerca de qué es la pesca incidental, y cuál es el mayor contaminante de los océanos… no, no son las bombillas, ni los tampones, son las redes y líneas de pesca que no se retiran, TODAS SIGUEN AHÍ). Hice esta receta para que puedan probar una alternativa diferente con sus familias este viernes santo. Multipliquen la receta cuantas veces quieran para un grupo mayor de personas.

Ingredientes

1 lata de 400 g de palmitos
½ hoja de nori
30 g de avena
10 g (1 cucharada) de harina de gluten
Ralladura muy fina de 1 limón pequeño o ½ grande

Apanado
½ t de leche de soya
½ t de harina blanca
½ t de panko o pan rallado
Abundante aceite de maravilla para freír. Es importante usen aceite de maravilla en este caso porque vamos a freír a una alta temperatura y el aceite de maravilla tiene un punto alto de ahumado (227°C ¡mucho más de lo que alcanzará nuestra preparación!), mientras menos alto el punto de ahumado, peor es ese aceite para nuestra salud cuando lo calentamos.

Paso 01

Partimos tostando el nori. Ponemos la media hoja de nori en una sartén antiadherente limpia y seca y tostamos hasta que la hoja comience a reducirse en tamaño. La ponemos junto con la avena gluten de trigo y molemos hasta que no queden trozos grandes. Agregamos los palmitos y la ralladura de limón y pulsamos hasta que la mezcla se junte, pero aún se puedan ver trozos de palmito.

Paso 02

Ponemos en una superficie y dividimos en porciones, hice 15 bolitas de buen tamaño, consideren que crecen con el apanado. Tomamos cada bolita, la pasamos pos la leche vegetal, luego por la harina, nuevamente por la leche vegetal y finalmente la rodamos en las migas de pan.

Paso 03

Repetimos hasta hacer todas las bolitas y luego freímos en abundante aceite, si no logramos profundidad para que queden cubiertas, las podemos ir rodando con cuidado para que se doren por todos lados.

Paso 04

¡Servimos con cuñitas del limón que usamos para ralladura para no desperdiciar nada!
¡Felices fiestas!